En las miniaturas de los vídeos hay que crear una conexión humana. De modo que hay que inventárselo: cuanto más grande abras la boca, más grande parecerá el gesto de sorpresa.

La muchachada de Materialisimo, que se ve tiene buenas mimbres en estas lides, explica cómo convertirse en el Clickbaiter Master™ o el amo del cotarro de los «vídeos con cebo» (a.k.a. «clickbait»). Sarcástico a tope, pero real como la vida misma.

En el título incluye siempre entre paréntesis alguna obviedad (así la gente sabrá cómo debe sentirse)

Se trata de una tradición que aunque ha sido explotada hasta la saciedad en YouTube y las redes sociales sigue funcionando como si tal cosa (¡hasta la usan en televisión! No sólo la gente sigue viéndose impelida a hacer clic, clic, clic, sino que además las redes sociales no hacen nada para impedir tan burdos engaños. Da igual que las fotos en miniatura sean falsas, los titulares exagerados y grotescos o todo el asunto claramente inventado (¿Cómo? ¿Que ya tienes el GTA VII?) Vivimos en la era del TODO VALE, así que… ¡a darle caña!

(Vía The Awesomer.)

Este invento calificado de «revolucionario» por sus propios inventores es ni más ni menos que lo que se ve en la foto: una tapa de inodoro con sistema de monitorización cardiovascular incorporado.

Según dicen, los sensores pueden captar el ritmo cardíaco «mientras el cuerpo realiza sus procesos naturales» en el cuarto de baño y analizándolos según modelos matemáticos, detectar patrones y posibles enfermedades.

Aunque no lo parezca, el invento es totalmente serio y va a ser enviado en breve a la FDA estadounidense para conseguir los «permisos del departamento de sanidad», suponemos que principalmente en aras de garantizar que no electrocute el culo de quienes lo usan. Después de eso, a conseguir financiación y a fabricarlo e instalarlo.

Un villano tiene una bomba y va a hacer explotar el mundo, de modo que nuestros protagonistas tienen que usar Internet –eso sí, en Australia– para impedirlo. Y claro, es más difícil decirlo que hacerlo… No hay más que ver cómo la secuencia de los acontecimientos pronto se va de madre.

Seguro que es fácil encontrar paralelismos entre las conexiones a Internet australianas y españolas donde la cosa «no va muy fina».

El vídeo –que ya es incluso un poco viejuno– es del grupo cómico CrackerMilk, que descubrí a través de MefaFilter. No sólo ha mejorado con los años sino que tiene sketches ultrabreves y geniales, algunas que tienen que ver con temas tecnológicos y muchas otras que no. No me resisto a dejar este: «Gente que no lee las instrucciones»

Pero también te puedes reír bastante con el de la coleta, el de Toy Story, el del juego de las sillas o la estrambótica pelea de almohadas.