Enero2021

Por @Alvy — 28 de Enero de 2021

La muchachada de MayTree se ha marcado un repaso rápido y vocal de los efectos de sonido de Windows: el arranque de Windows XP y Windows Vista, los efectos al conectar y desconectar dispositivos en el los puertos USB, el gong del error y el swoshhh al vaciar la papelera de reciclaje.

En tarirí tarará para apagar el equipo a cinco voces, y a dormir.

Por @Alvy — 26 de Enero de 2021

Tan perturbadora como inquietante, esta escena de Will Smith en una «primera cita» con Sophia, la robot es de traca.

Para empezar, es imposible no fijarse en ese cuello con las carnes retorcidas hasta el exorcismo, propio del mismísimo Satanás. Los ojos vidriosos y el cráneo transparente tampoco es que ayuden mucho a superar el valle inquietante, sino que más bien profundizan en él. Y de la aparente sobredosis de Bótox ya ni hablamos.

La conversación tampoco es que sea muy fina: recordemos que Will Smith protagonizó Yo, robot (2004) donde los robots intentaban matarlo cada dos escenas. Aquí le tratan un poco mejor –aunque le dan finas calabazas– pero nos quedamos con la sensación de que de avanzada Sophia no tiene gran cosa.

Por @Alvy — 26 de Enero de 2021

El primer reloj atómico «de pulsera»

En una prehistórica página de LeapSecond, la web dedicada a la «medición del tiempo y las frecuencias con la máxima precisión» me encontré con esta foto que llaman el primer reloj atómico de pulsera. Tan estilo que supera incluso al famoso Casio G-Shock Atomic Solar.

El primer reloj atómico «de pulsera»

Se trata de una versión «especial» del HP 5071A, un reloj atómico de cesio desarrollado por HP en los años 90. Lo único que parece un tanto incómodo es su peso y que las baterías sólo le duran 45 minutos. Por el lado de las ventajas están su increíble precisión atómica y que después de una semana de lucirlo te deja los brazos mazaos, pudiendo convertirte en el Schwarzenegger de la precisión temporal.

(Vía Hacker News.)

Por @Alvy — 22 de Enero de 2021

Cesárea

Superando probablemente la historia del cirujano que tuvo que operarse a sí mismo de apendicitis estando aislado en la Antártida hoy me he enterado de que en el año 2000 una mujer mexicana se hizo una cesárea a sí misma para dar a luz a su bebé y además vivió para contarlo.

Las excepcionales y WTFquicas circunstancias incluyen que era su octavo embarazo, estaba en un pueblecito aislado de las montañas y llevaba 12 horas de parto. Su marido estaba en una cantina, el hospital más cercano estaba a 80 km y no tenía teléfono. Para hacerse la cesárea se bebió una botella de licor a modo de «anestesiante» -algo que no parece muy buena idea, pero funcionó- y confió en su experiencia para despedazar animales: se rajó la tripa con un machete de 20 cm y cuando pudo extraer al bebé cortó el cordón umbilical con unas tijeras. Luego cayó inconsciente.

Cuando volvió en sí consiguió que uno de sus hijos pequeños fuera a buscar ayuda; por suerte no sangraba mucho y enrollándose un jersey en el abdomen consiguió detener un poco la hemorragia. Cuando llegó al hospital 16 horas después los doctores se quedaron asombrados y la felicitaron por «lo bien que lo había hecho». El bebé se llamó Orlando. La hazaña quedó recogida en el informe Self‐inflicted cesarean section with maternal and fetal survival publicado en el International Journal of Gynecology and Obstetrics.

(Vía The Healthy + Reddit.)

Por @Alvy — 19 de Enero de 2021

Es imposible empezar a ver este vídeo y dejarlo a medias. Al simpático hamster le han preparado un escenario de laberínticas habitaciones decoradas al más puro estilo Portal. De modo que va pasando de una otra no sin dificultad: a veces tiene que caminar sobre ruedas que mueven mecanismos, abrir puertas y otras cosas más difíciles incluso.

Es una sensación muy parecida a cualquier secuencia estilo Misión imposible, que sin duda ganaría mucho con la banda sonora de la película. Nos permitimos sugerírselo a Captain Hamster, autor del montaje y del vídeo.