El robot del vídeo tiene unos sensores con un sistema de seguridad para evitar cortar «tejido blando», como por ejemplo la carne humana, algo que ya vimos en la sierra inteligente y respetuosa con las salchichas. Lo que se ve son diversas pruebas con buenas paletillas traídas de la carnicería a modo de dummies, que son rajadas de arriba a abajo en diversas modalides y con diversas calibraciones del sistema [hasta 1:00]. Entonces es cuando entran en juego los voluntarios humanos que ponen su brazo debajo del robot en movimiento cuando se activa el sistema de seguridad [1:30]. Como los sensores hacen que el brazo se detenga en seco en cuanto detecta en problema, los voluntarios salen ilesos, pero ¡ouch, ouch! hay que echarle valor. (Vía Popular Science.)