Por Nacho Palou — 15 de Febrero de 2017
Trasladando las características de una araña a un hombre, de una forma algo más “estricta”, el Spider-Man resultante es algo menos glamuroso que el que tenemos costumbre de ver en cómics y películas.
Trasladando las características de una araña a un hombre, de una forma algo más “estricta”, el Spider-Man resultante es algo menos glamuroso que el que tenemos costumbre de ver en cómics y películas.
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