El fabricante de juguetes japonés VStone tiene este muñeco llamado Hiro que es un bebé sin rostro. Dependiendo de cómo te pille el día, o cómo lo mires, o qué pasa por tu cerebro, puede resultar simpático y cariñoso o algo inquietante e incluso un poco estremecedor y espeluznante.
En vez de muñeco lo llaman «dispositivo de comunicación y recuperación de la salud» y eso se explica por la tecnología que emplea: a medida que se juega con él hace ruidos desde la tristeza al alborozo; llora o ríe, de forma gradual. Quienes juegan con él, que suelen ser ancianos que necesitan de cuidados y compañía, deben encontrar ese punto como «recompensa» del juego.
Sus creadores explican que si el muñeco tuviera rostro sería menos convincente de lo que es. Visto así, parece una buena idea, pero a simple vista asustar, asusta un poco.
(Vía Spectrum.)