Dicen los chavales de DD Squad –un equipo de acrobacias esloveno– que para preparar este numerito se inspiraron en la canción Trampoline de Shaed. Ya sea de un modo u otro lo cierto es que acabaron haciendo cabriolas a 30 metros de altura en una cama elástica gigante de unos 40 por 40 metros de superficie, suspendida de una enorme grúa.
Si el asunto da vértigo hay que tener en cuenta que además de la red elástica principal tan solo hay otra fina red de seguridad justo debajo… Pero treinta metros más allá, en el suelo no hay nada de nada, ni colchonetas ni otros sistemas de seguridad: tan solo el frío y duro suelo.
La «actuación» tiene su riesgo porque si en uno de los saltos el asunto alguien se descompensa un poco y se va por los laterales (como hemos visto mil veces en los «vídeos de primera», porque la fuerza de un rebote múltiple es muy difícil de calcular)… ¡Chof! Por suerte parece que no sucedió nada irreversible y que todos se lo pasaron muy bien. Aunque el que se ve sentado en la barra lateral grabando parte del vídeo igual no lo tenía tan claro.
(Vía The Awesomer.)