Por Nacho Palou —
¡Cachis!, no me cabe la mesa por una millonésima de micra.
Lo vio Antonio en la tienda El Globo de San Sebastián de los Reyes (Madrid),
¡Cachis!, no me cabe la mesa por una millonésima de micra.
Lo vio Antonio en la tienda El Globo de San Sebastián de los Reyes (Madrid),
PUBLICIDAD