Este monstruo marino de tentáculos púrpuras es una «escultura inflable» instalada en uno de los astilleros de la marina del puerto de Filadelfia por dos artistas llamados Filthy Luker y Pedro Estrellas que llevan años creando montajes similares.
Los veinte gigantescos tentáculos salen de las ventanas del Edificio 611 para sorpresa de los paseantes que van por la calle, quienes pasan por el río Delaware y quienes sobrevuelan el aeropuerto de Filadelfia. Dependiendo de la meteorología el viento los mueve más o menos, pero incluso cuando están más o menos estáticos resultan estremecedores – y un poco Futurámicos, todo hay que decirlo.