Este curioso invento se llama Treadwall Fitness y resulta ingenioso: una pared de escalada móvil al estilo de las cintas de caminar, que convierte la pared en una «pared infinita» sobre la que se puede practicar a poca altura del suelo.
Como demuestran en el vídeo además puede variarse la inclinación para que sea más o menos difícil. Aunque el recorrido y la colocación de los agarres se puede modificar lo único que sucede es que en un mismo intento no varían mucho, de modo que cuando has recorrido los 4 o 5 metros que debe medir el patrón se repite. Pero bueno, al menos si te caes no te estampas.
P.d. acabo de recordar que hace siglos que lo vimos pasar en foto y ya nos llamó la atención.