En Altwork tienen esta silla –o sillón– diseñado para trabajar en horizontal. Dicen que ha sido concebido y calculado por ingenieros aeroespaciales con el objetivo de permitir a la gente enfocarse y cuidar su salud. Muy loable. Que el montaje tenga aspecto de sillón de consulta de dentista es un efecto colateral.
En teoría te alivia todos los males: los dolores del cuello, la espalda, la muñeca, mejora la circulación sanguínea… El Santo Grial, vamos. Además va equipado con fijaciones, imanes, ruedas y todo lo que se necesita para el confort y la adaptabilidad total.
Pero esto no es para débiles de corazón: si pagar más de 200 euros por un sillón de oficina te parece caro, y 1.000 un robo, ve preparando entre 4.000 y 6.000 eurazos por una Altwork Flex o Altwork Signature (las primeras ya están agotadas), donde al menos puedes elegir el color… aunque el monitor no va incluido.
(Vía Mashable.)