[Lo divertido empieza en 01:40]
- Nunca apuntar el láser a otra persona, especialmente a los ojos
- El contacto con los ojos puede causar daños permanentes
- Evitar cualquier exposición directa o reflejada con el rayo
- Evitar que los punteros láser sean utilizados por menores
El cafre de Styropyro se dedica en sus ratos libres, cual científico loco, a fabricar láseres de alta potencia, espadas de luz y otros inventos propios del Dr. Maligno.
En esta ocasión se ve que pasó por su cabeza la idea de fabricar un bazuca láser con piezas sueltas que tenía por ahí; el resultado es una especie de arma de destrucción de 200W de potencia con un consumo de 1kW. Para que te hagas idea eso es más o menos lo que puede chupar el microondas que utilizas a plena potencia para calentar pollos o la mitad más o menos que un aparato de aire acondicionado típico de los de enfriar un salón.
Por otro lado, un láser de 200W son muchos watios. Un puntero láser típico para hacer presentaciones o jugar con el gato tiene 5 mW. Hace años nos dejaron probar un láser portátil de 95 mW (es decir: 0,095W) y ya nos pareció muy poderoso, al nivel una burrada. Y en Estados Unidos el límite para los láseres domésticos de consumo es algo más: 0,5W.
De modo que este bazuca-láser es unas 2.000 veces más poderoso que un láser que ya nos parecía poderoso y 400 veces más potente que lo que permiten comprar al común de los mortales (!!) El vídeo es una buena prueba de sus «posibilidades» - aunque tampoco explica cuánto han costado las piezas ni cuánto paga de electricidad al mes, que será un pico.
¡Niños, tened cuidados y no os volváis malignos!