Por @Alvy — 2 de Febrero de 2017

Para ver en versión supercomprimida de la película tradicional de hoy (según manda la tradición) que obviamente es Atrapado en el tiempo (1993, Harold Ramis) tan solo hay que usar este montaje, que desdobla en múltiples pantallas la acción a medida que se repiten los días. Es un poco lioso pero práctico, eso hay que reconocerlo.

Esto deja en tan solo 31 los 101 minutos originales, que como sabemos son 33 años en el tiempo subjetivo del protagonista, ni más ni menos que 12.058 versiones del mismo maldito día).

Es un montaje de Neil Fennell, al que llegué vía Boing Boing.

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